La Asociación Empresarial Eólica (AEE) recurrirá el nuevo real decreto de renovables publicado este lunes en el BOE "con todas sus fuerzas y en todas las instancias" posibles, según ha anunciado su presidente, José López-Tafall, quien considera la nueva regulación injustificada y desproporcionada.
"Su aplicación nos va a abocar a una larga travesía de parálisis de inversiones, multitud de pleitos a nivel nacional e internacional, y a la continuidad de la incertidumbre", afirmó.
El presidente de la AEE aludió además a los efectos negativos para la eólica asociados a los "flecos de la reforma", especialmente la nueva regulación sobre el servicio de interrumpibilidad, cuyo coste debe ser financiado por los operadores en proporción a su firmeza.
Esta medida puede convertir a la eólica en "el principal contribuidor a pagar este servicio", que tiene un coste de unos 500 millones al año y que consiste en un incentivo a la gran industria por suspender su actividad en momentos de abundante demanda y escasez de oferta. La interrumpibilidad se paga a pesar de que "no se utiliza", señaló.
López-Tafall lamentó además que los recortes a la eólica se produzcan después de que esta tecnología haya logrado el "récord" de convertirse en 2013 en la principal fuente de generación eléctrica.
Junto a esto, citó algunos de los "errores de la reforma", entre ellos el de convertir a las primas a la eólica en parte de los culpables del déficit de tarifa, cuando en 2007, momento en que comenzaron a dispararse los costes, ya se encontraba instalado el 66% del parque eólico nacional. Otro de los "errores" ha sido el de "penalizar" a una tecnología con una probada trayectoria en términos de creación de valor y empleo.